Los objetivos importan.
Lo hacemos en todas partes: el sueño de un título nos ayuda a pasar esas largas horas de estudio, la imagen de estar en forma para el verano nos permite decir que no a esos deliciosos chilaquiles (como los que estoy oliendo mientras escribo). Y en el ahorro sucede lo mismo; esa motivación que te da imaginar un auto nuevo, unas merecidas vacaciones o el sueño de la casa propia es la gasolina para hacer el esfuerzo de ahorrar y posponer la satisfacción del gasto inmediato.
Sin embargo, muchas veces no tenemos un objetivo claro para nuestro ahorro. ¿Es eso un problema?
De forma contraintuitiva, puede que la falta de objetivos para ahorrar no sea un problema, sino más bien una gran ventaja.
En La psicología del dinero de Morgan Housel, el autor plantea las virtudes del poder ahorrar “por si acaso”, sin un objetivo en particular, considerándolo incluso una mejor forma de ahorrar para tu bienestar financiero general (puedes ver nuestra discusión de este libro aquí).
Así que si te complica no tener un objetivo claro para tus ahorros (como un viaje, una casa o algo en particular), puede que esto sea más una bendición que un problema.
Aquí te explico por qué.
Libertad
Toda acción tiene un objetivo, incluso cuando no tiene nombre y apellido, y en el caso de tus ahorros, Morgan postula, el objetivo es tener libertad.
Tener ahorros sin nombre ni apellido te da la libertad de darles un uso cuando sea pertinente. Te da la libertad de tomar decisiones que no podrías si no tuvieses un colchón disponible para tu uso: dejar tu trabajo en pos de una mejor oportunidad, emprender, viajar, ayudar a algún familiar o amigo, etc.
Cuando tus ahorros están marcados por un objetivo específico, esa libertad se reduce. Te duele usar tu dinero para otro objetivo y te amarras a decisiones que tomaste en el pasado.
Tranquilidad
Todos sabemos que el estrés financiero es una de las plagas de este siglo y nos afecta mucho más allá de nuestro bienestar económico. Estudios han mostrado la fuerte relación entre el estrés financiero y el divorcio e incluso la depresión.
En este sentido, saber que tienes un respaldo te da tranquilidad, ya que estás preparado para cualquier eventualidad, desde emergencias médicas hasta la pérdida de empleo. Este colchón financiero actúa como un amortiguador contra los altibajos de la vida, proporcionando una sensación de seguridad y bienestar.
Aprovechar oportunidades
Hablemos del nacimiento de Google. Sus fundadores (Sergey Brin y Larry Page) tenían una gran idea de cómo mejorar las búsquedas en la naciente internet, pero ningún inversionista.
Fue solo después de una presentación que Andy Bechtolsheim, cofundador de Sun Microsystems, al escuchar la idea de Google, la encontró interesante y sin pensarlo mucho les entregó un cheque por 100,000 dólares.
Hoy esa apurada inversión vale miles de millones de dólares y, si bien el ojo de Andy en ver el valor de Google es legendario, fue crítico el tener la capacidad de girar ese cheque sin pensarlo dos veces. En el mundo del capital de riesgo esto se llama tener dry powder o “pólvora seca”.
Ok, pocos van a tener la oportunidad de invertir en el próximo Google antes que explote, pero la vida está marcada por oportunidades donde tener esta “pólvora seca” puede marcar una enorme diferencia en tu bienestar futuro.
Ya sea una oportunidad de negocios o la casa de tus sueños a un descuento insospechado, el que tus ahorros no estén amarrados a un objetivo específico te permiten “girar ese cheque” y aprovechar
El mundo cambia, y tú también
¿Hace 10 años, cómo esperabas verte hoy?, ¿Se cumplió tu predicción?
¿Cómo crees que serán los próximos 10 años?
En lo personal hace 10 años me imaginaba un futuro muy distinto al actual y en general a la mayoría de las personas les sucede eso. El mundo a veces cambia de maneras dramáticas e impredecibles (quién iba a decir que el 2024 iba a ser el año de la IA).
Esto no le sucede solo a nuestra incapacidad de predecir el futuro que nos rodea, sino también nuestro propio futuro, nuestros gustos, intereses y necesidades, que también cambian dramáticamente a lo largo de nuestras vidas al cumplir distintas etapas.
De esta manera, lo que es importante para ti hoy puede no serlo mañana. Ahorrar sin un objetivo específico te permite adaptarte a estos cambios sin sentirte limitado por tus decisiones pasadas.
Tal vez ese fondo “Vacaciones por Asia” próximamente se llame “Matrimonio”, o ese objetivo llamado “Playstation” sea reemplazado por “bicicleta”. Lo importante es tener la flexibilidad
Consistencia
Hagamos una analogía.
Al momento de hacer una dieta, ¿qué es más efectivo a largo plazo?
- Hacer una dieta extrema y matarte en el gimnasio para llegar al verano de la mejor forma.
- Mejorar tus hábitos alimenticios e incorporar una vida activa porque tu salud lo va a agradecer.
Cuando anclas tu ahorro a un objetivo definido, algún día ese plazo se va a cumplir y tu ahorro va a desaparecer. Si quieres mantener un ahorro sano vas a necesitar motivarte con algún nuevo plan u objetivo, lo cual con el tiempo puede desvanecerse si el tiempo no es el correcto (estás más justo, tienes algún nuevo gasto, etc.). Es muy fácil decir “mañana vuelvo a ahorrar”.
Por el contrario, cuando tu ahorro no está anclado a algún evento o gasto específico, nunca vas a llegar a esa situación. Tu motivación por ahorrar no muere si usas parte de tus ahorros porque la razón de ahorrar es “ahorrar es bueno”. Esta motivación es independiente de si ahorras 10 mil pesos o 10 millones de pesos, por lo que nunca te estarás saliendo de los beneficios que te da el estar invertido siempre. Como dice el dicho “El tiempo en el mercado le gana a hacer timing del mercado”.
¿Cómo implementarlo en Fintual?
En Fintual, una forma simple de invertir sin algún objetivo específico es cubrir cada tipo general de necesidad con un objetivo genérico.
- Cubrir imprevistos con un objetivo de corto plazo y bajo riesgo (Objetivo “Emergencias”): esta es la parte más líquida y segura de tu inversión, lista para darte tranquilidad ante imprevistos y fácil de liquidar independientemente de las fluctuaciones del mercado.
- Crecer tu patrimonio para el mediano y largo plazo (Objetivo “Crecimiento”): este es un fondo pensado para mejorar tu situación financiera para los próximos 5, 10, 20 años o más. Pueden ser 1 o más objetivos dependiendo si quieres separar el mediano del largo plazo.
- Prepararte para la vejez (Objetivo “PPR”): este es un fondo tipo PPR, donde puedes dejar que el mercado trabaje por ti durante décadas y además gozas de los beneficios tributarios del PPR.
Así que ya sabes. Si no tienes un objetivo claro para qué ahorrar, estás a la delantera.
Disclaimers:
- La rentabilidad o ganancia obtenida en el pasado por los fondos, no garantiza que ella se repita en el futuro. Los valores de las cuotas de los fondos mutuos son variables.