Un HP con Pentium II fue el primer computador de la casa. No era el más rápido ni el con mayor capacidad, pero el entusiasmo por el ingreso de la familia a la modernidad llegó incluso a mi papá, hasta entonces bien reacio a la tecnología.
Motivado, me pidió que le enseñara a usar el programa para escribir. Dos sesiones le bastaron para dictaminar que la computación no era lo suyo. Posar la flecha del mouse sobre el ícono de Word ya era una tarea que requería, a su juicio, una precisión quirúrgica. Y después tener que hacer doble click, era una motricidad digna de un desactivador de bombas.
Me acordé de ese episodio cuando salió la norma que obliga a bancos y emisores a dejar de usar tarjetas de coordenadas como medio de autenticación. La noticia generó cierta resistencia por la dificultad que podrían tener algunos adultos mayores en adoptar nuevas tecnologías. Además, con la tarjeta de coordenadas como que jugaban un mini bingo cada vez que autorizaban una transferencia. Yo igual lo echaría de menos.
Y a los bancos, siempre pendientes del bienestar de sus clientes, les preocupaba el poco plazo que tenían para traspasar a los nuevos métodos, a todas las personas que aún usan las tarjetas.
Pero la CMF, el regulador que emitió la norma, tomó en consideración los comentarios y dio un año más de plazo. Una decisión juiciosa, pero habría sido divertido ver a los bancos tratando de revertir la medida con jingles como el hitazo de Marcelo de Cachureos “Quiérelos, son los ancianos…”

Ciencia
Ruta más corta en grafos: algoritmo supera a Dijkstra tras 65 años (con una pizca de sal)
por Fernando Suárez, Portfolio Manager
Cada vez que tomas un Uber, pides un Rappi o usas Google Maps, existe un problema computacional que toda aplicación debe resolver. Dado un punto A y un punto B ¿cuál es el camino más corto para llegar desde A hasta B?
Este problema, conocido como el problema de la ruta más corta u óptima, ha perseguido a la humanidad desde hace siglos.
Y puede que desde hoy resolverlo sea más rápido.

Cultura
Una semana solo de AI: la cultura más allá del hype
por Sara Vásquez, psicóloga
¿Qué se te pasa por la cabeza cuando alguien de tu trabajo muestra un proyecto exitoso y dice que se apoyó en AI para lograrlo? ¿Te parece más o menos competente?
En ese estudio, más de 28.000 devs calificaron la calidad de un código. A los devs que se les dijo que el código fue hecho con ayuda de AI, lo puntuaron 9% peor que los que creían que lo había codeado un humano solo. Y si les decían que el código lo hizo una mujer con ayuda de AI, puntuaban 13% peor.

Ciencia
Los efectos de las polémicas de Trump con las universidades: el caso de las resonancias magnéticas
por Felipe Cortés, ingeniero
Terrence Tao y Emmanuel Candès eran dos matemáticos viviendo en Los Angeles, California a principios de los 2000 y tenían a sus hijos en el mismo jardín. Cuenta la leyenda que gracias a esa coincidencia publicaron lo que se convirtió en uno de los trabajos con más impacto en la técnica de resonancia magnética.
Hace unos días Tao desmintió finalmente la origin story de la teoría. Si bien tenían a sus hijos en el mismo jardín, la mayor parte de su colaboración se desarrollaría en el Institute of Pure & Applied Mathematics (IPAM), y que hace unos días perdió gran parte de su financiamiento luego que UCLA se negara a acatar las exigencias del gobierno federal norteamericano.

Sobremesa
✈️ ¿Quién paga por su jet privado?: el New York Times se puso polémico y en su editorial criticó el sistema de vuelos de Estados Unidos. Según ellos, el pasajero promedio que vuela en economy, financia a los que se dan el lujo de viajar en jet privado. Por favor, dejen a la pobre familia Roy viajar tranquila.
📍 Instagram, un poco más creepy: al parecer vender mundos perfectos y viajes llenos de felicidad no es suficiente, así que Instagram activó una función de geolocalización para que todos tus amigos sepan dónde andas. El problema es que muchos quedaron sorprendidos cuando entraron y notaron que en su mapa había algunas cuentas con las que solo habían compartido una historia hace poco. Qué triste será cuando nos enteremos que ese reel en verdad no fue filmado en Aruba sino en una de las playas de Lavín.
💔 El amigo que te dice la verdad: ese que todos necesitamos, especialmente cuando estamos en una relación tóxica, para que nos diga “basta, termina, no es para ti”. El problema es que tres semanas después volvías con tu ex y el buen amigo quedaba como un soquete. Así que la gente empezó a pedirle la gauchada a GPT, que sin remordimientos les aconsejaba cortar por lo sano.
🧓 La utopía final: The Bird’s Nest, El nido del pájaro en español, es una comunidad en Texas donde 11 mujeres decidieron vivir juntas hasta hacerse muy viejas o incluso morir. Se apañan y se acompañan, algunas están retiradas y tienen entre 60 y 80 años. Y dicen que lo pasan muy bien. ¿La única regla? No puede haber drama.

Tecnología
Leverless: el mundo de los controles sin palanca
por Tomás Morales, escritor
Hace unas semanas se realizó en Las Vegas una nueva edición del EVO, el torneo de juegos de pelea más grande del mundo.
Una de las tradiciones de sus asistentes consiste en registrar los controles que cada jugador lleva consigo, y todos los años se presentan varios candidatos al más bizarro: un control de Guitar Hero, un volante para jugar Gran Turismo, cajas de pizza… y un vivero, muchas veces diseñados por sus propios dueños.
Y ya se ve una nueva moda: los controles sin palancas.

Cine y Series
Hate-watching del mes: la nueva Guerra de los mundos es considerada una de las peores películas de la historia
por Iñaki Goldaracena, cineasta
La historia de La guerra de los mundos empezó como una novela de H. G. Wells que se volvió tan popular, que se convirtió en películas, programas de radio, series de televisión, un álbum y novelas gráficas.
Pero ahora llega la peor adaptación hasta el momento. Una película contada desde pantallas que es más bien un comercial de Amazon, una apología a la cibervigilancia y una excusa barata para hacer un producto en la pandemia. Wells se revuelca en su tumba.
Pero algo de este fracaso ha alzado la curiosidad de la gente. ¿Es tan mala que llega a ser buena?
