Los bancos centrales alrededor del mundo continúan poniéndose mucho más agresivos ajustando sus políticas monetarias a fin de lograr controlar el problema de la inflación que vivimos a nivel global.
Esto ha llevado a que los mercados accionarios continúen ajustándose, y en muchos casos se encuentren en lo que se conoce como “bear market”, o mercado bajista.
Al 22 de junio, el S&P 500 se encontraba -21% por debajo del cierre de 2021.
La semana pasada la Reserva Federal de EE.UU. (la Fed) elevó la tasa de política monetaria en 75 puntos base, esto después de mantener en semanas anteriores un discurso descartando dicho aumento y asegurando aumentos en línea de los 50 puntos base para las siguientes juntas.
Por cierto, este fue el mayor aumento que ha tenido la Fed desde 1994.
Las expectativas, el verdadero problema
No es como tal la sorpresa de los 75 puntos base, sino el cambio en la retórica de la Reserva Federal en los últimos meses.
En el informe del Comité de Operaciones de Mercado Abierto —rama de la Fed responsable de tomar las decisiones de política monetaria a corto y largo plazo— se habló de que mantienen su compromiso para restaurar la estabilidad de precios. En pocas palabras: bajar cueste lo que cueste la inflación.
Con esto los inversionistas cada vez le creen menos a la Fed. Hace 6 meses hablábamos que la inflación ya no era transitoria y que existía un problema; el mercado consideraba tan sólo 4 alzas de tasas de 25 puntos base en el año. Asimismo, la Reserva Federal iba a ser capaz de subir su tasa, sin que la economía se viera afectada.
Ahora parece que la principal preocupación de la Reserva Federal es la inflación, y que están dispuestos a endurecer la política monetaria, aún si esto aumenta los riesgos de una posible recesión.
Qué podemos esperar en los siguientes meses
Esta postura por parte del banco central de Estados Unidos lleva a la percepción de un panorama económico más retador, o con mayores riesgos. Lo que significa para el crecimiento económico mayores obstáculos.
De igual manera, esta incertidumbre y un menor crecimiento trae un impacto negativo en los resultados corporativos, donde podremos ver menores crecimientos en utilidades para las empresas.
La postura más agresiva de los bancos centrales aumenta los riesgos tanto para el crecimiento económico como para las acciones.
Todo esto, junto con los problemas geopolíticos que existen actualmente, es el principal factor a la volatilidad que se mantiene en los mercados financieros, y que seguiremos viendo hacia los siguientes meses, probablemente durante la segunda mitad del año.
Cuándo terminará esta volatilidad, o si el mercado ya tocó fondo, es algo que nadie sabe, y sería irresponsable de mi parte decir algo diferente.
Lo que sí sabemos es la perspectiva en el largo plazo, donde los mercados, siguen manteniendo una perspectiva favorable, sustentado por las utilidades de las empresas.
En el corto plazo podríamos ver un menor crecimiento en las utilidades, como ya mencionamos; en el largo plazo, volveremos a ver un impulso en el crecimiento en utilidades.
En el siguiente gráfico ponemos la evolución de las utilidades por acción que han tenido las compañías del S&P 500 a lo largo de la historia, aún considerando las fuertes crisis del pasado.
Invirtiendo en épocas volátiles
Primero que nada es importante tener diversificado tu patrimonio, y aquí la importancia de tener de la mano contigo una plataforma que no solo te de acceso a los mercados y diferentes activos de riesgo, si no que también te ayude a utilizar diferentes estrategias acorde a objetivos y horizontes de inversión:
- Gestión de tu liquidez: tu dinero para el corto plazo, ya sea en el mes corriente o en los siguientes 11 meses debe de estar no en una chequera, ni un depósito a plazo, si no en un fondo money market. Aquí podrás aprovechar justamente de él alza en tasas de interés y obtener un rendimiento.
- Horizonte mediano plazo (moderado): tu dinero que no necesitarás en los siguientes meses pero sí en el siguiente año, ante la probable volatilidad que tienen activos más riesgosos como el mercado de capitales, es recomendable escoger un fondo de inversión que también tenga un porcentaje invertido en deuda —renta fija—. Esto ayuda a mitigar las presiones temporales de los mercados causadas por los ciclos económicos o acontecimientos extraordinarios —como el conflicto en Ucrania—.
- Horizonte de largo plazo (agresivo): tu dinero que quieres enfocar a un objetivo de mucho más largo plazo, como puede ser la compra de una casa, universidad de tus hijos, o en pocas palabras en un horizonte de inversión de mínimo 3 años puede tener un perfil más riesgoso, y mayor exposición a renta variable.
Por lo mismo de que no lo vas a utilizar pronto no te dejes guiar por las minusvalías temporales que este puede tener cuando aumenta la volatilidad en los mercados financieros, es algo normal.
Las buenas noticias
No necesitas un asesor financiero que te ayude a hacer tus objetivos y estrategias de inversión, en Fintual tenemos todo para que crees tus objetivos y te ayudamos manejar y crecer tu patrimonio con tus diferentes objetivos.
Si aún no inviertes con nosotros es muy sencillo, rápido y transparente. Puedes empezar una cuenta aquí.