Hay 2 tipos de personas en Chile. Las que ya empezaron a jugar pádel y las que van a empezar a jugar.
Hace casi 3 años que me uní al primer grupo, y luego empujé a varios en Fintual a hacer lo mismo. Armamos un grupo para coordinar partidos, y llegamos a estar jugando más de 7 partidos por semana.
En esos 3 años, el pádel ha seguido creciendo muchísimo, y la cantidad de canchas que existen en Chile aumenta cada día. En diciembre del 2021, la División de Infraestructura del Ministerio del Deporte levantó un catastro geolocalizado de todas las dependencias deportivas en el país y tenían registradas 317 canchas. En septiembre del 2022, ya había cerca de 750 según La Tercera. Y hace pocos días fue noticia el permiso que obtuvo una gran compañía de retail para poner 16 canchas en Las Condes.
Y la pregunta que nos nace a quienes tenemos una mentalidad más de negocios es qué tanto sale poner una cancha de pádel y qué tan conveniente es.
Hagamos el análisis, pero para que no llegue nadie después a reclamarme que les fue peor de lo que vimos acá, aviso que es un análisis simple, con varios supuestos que no deberían influir mucho pero que lo hacen más fácil.
En primer lugar es necesario fijar algunos parámetros. Yo usaré una mezcla de fuentes oficiales, no oficiales, y mi ojo, pero dejaré disponible al final la planilla donde puedes modificar los parámetros a gusto para llegar a tu propia evaluación.
Algo importante es que consideraré un arriendo para el terreno en lugar de una compra. Evaluándose con la compra del terreno, se hacen mucho más relevantes las características y la valorización del mismo, por sobre las del negocio de las canchas de pádel. Se transforma prácticamente en un negocio inmobiliario.
Ojo: Si quieres hacer el análisis tú misma, te recomiendo irte a la planilla ahora y copiarla, modificar los parámetros a tu gusto según consideres razonable, y recién después de eso ver los resultados (y seguir leyendo el artículo).
Considerando entonces ocupaciones y valores diferentes para horas puntas y horas bajas, e incluso diferentes ocupaciones según la temporada (alta o baja, de más o menos calor respectivamente), nos da que un proyecto para poner 4 canchas de pádel por 2 años tiene una TIR anualizada de 35% (¿una qué?). En otras palabras, que entrega un retorno de 35% anual.
35% anual es considerablemente más de lo que ofrecen depósitos a plazo (del orden de 10% en este minuto) o de la rentabilidad histórica de los principales índices bursátiles del mundo, como el S&P500.
Entonces, ¿debería tomar toda mi plata o endeudarme y poner canchas de pádel?
La respuesta es que probablemente no. Como cualquier inversión, tiene sus riesgos, y en primer lugar es importante destacar que es una inversión muy poco diversificada, es decir, estás poniendo todos los huevos (o muchos huevos) en una misma canasta. De hecho, simulamos dos escenarios distintos al base, uno optimista y uno pesimista, con pequeñas modificaciones únicamente en los parámetros de ocupación, y el cambio en el resultado es gigante: en el caso optimista la TIR es de 78%, y en el pesimista de -14%.
En segundo lugar, requiere tiempo, dedicación, e incluso conocimientos, que si no los tienes, puede no irte tan bien.
En tercer lugar, es una inversión muy poco líquida. Si empiezas con el proyecto, y luego necesitas tu plata urgente, difícilmente podrás recuperarla porque habrás tenido que firmar un contrato de arriendo por 2 años (o más), porque las canchas ya estarán instaladas en el recinto, etc.
Y por último, tiene un montón de riesgos que pueden ser difíciles de ver.
¿Qué pasa si el pádel pasa de moda?
¿Qué pasa si hay una temporada muy lluviosa y no logras arrendar las canchas?
¿Qué pasa si ponen otras canchas súper cerca y no tienes tanta ocupación?
Por eso, en Fintual siempre recomendamos invertir diversificadamente, y así están armados nuestros fondos. Si quieres invertir en canchas de pádel, trata de hacerlo con una parte no tan importante de tu patrimonio, así si te va mal, no estarás tan expuesta.