Siempre escucho radio en el auto, específicamente la radio Carabineros de Chile, porque tienen la mejor programación musical y porque la voz de los carabineros que conducen los programas son templadas y no me desconcentran al manejar.
Me acuerdo que mi mamá bajaba la música del auto mientras manejaba, y cuando comenzaba las maniobras de estacionamiento, de frentón apagaba la radio. Yo no entendía qué tenía que ver lo que escuchaba con lo que veía al manejar, pero ahora la entiendo perfectamente. Al manejar necesitamos nuestros cinco sentidos despiertos y si la música está muy fuerte o la información que escuchamos nos altera, perdemos la sensación de control. Es lo más evidente que hay, pero los adolescentes, como yo lo era entonces, no entienden esas cosas obvias.
Ahora de adulta lo que más necesito es paz para manejar; no puedo lidiar con voces agudas ni grabaciones de risas estridentes mientras intento encajar mi máquina de varias toneladas en un estacionamiento mal iluminado. Y esa paz, aunque suene cliché y falso, me la proporciona la radio de los carabineros, y una de las cosas que más me calma es que tienen una identidad de marca muy clara y bien desarrollada: en cada una de sus grabaciones (ya sea saludos de Navidad, anuncios de la hora y temperatura o simples rellenos de programación) destacan tres valores fundamentales: información, compañía y prevención.
“Un amigo en tu camino / es tu mejor compañía
Durante todo el día / con alegría
Informándote minuto a minuto / en especial / lo que pasa en las calles de la capital
ahhh ahhhh AHHHH
Prevención!
Música!
Información!
Carabineros de Chile radio, tu mejor opción!
Yeah!”
El jingle recuerda los shows en vivo de Luis Miguel, harta trompeta y grito entusiasta.
Lo encuentro tan bueno que me lo aprendí de memoria, y ahora espero con ansias que lo pongan en la radio para cantarlo. Entonces cuando Florencia, directora creativa de Fintual y editora en jefe de este reputado newsletter me planteó la idea de hacer un jingle para promocionar APV, dije que sí al tiro.
Nunca había hecho un jingle, pero siempre invento canciones a mis hijos, y soy de la teoría de que esas canciones son el mejor sustrato para que florezca un jingle memorable.
Yo no sé si el jingle de APV es el más pegote de todos, sin duda todo es perfectible, pero lo que intenté hacer fue cantar algo simple, en tonos mayores. Tuve la ayuda del mejor: Álvaro Díaz, gran compañero creativo. Después de almorzar nos subimos al auto y le conté de mi misión. “Tengo que inventar un jingle. Las palabras que tienen que estar son: conveniente, jubilación, ahorro… Fintual”. Nos pusimos a gritar melodías y la que pegaba más quedaba. El ejercicio es muy entretenido, es un juego exigente en que cada uno “compite” por la frase y melodía más pegote y que capture el espíritu divertido, liviano de sangre pero profesional con el que Fintual habla a sus clientes.
Después de grabar un demo cantado a capella en el auto, le cambié unos detalles de la letra para que quedara bien interpretado por una mujer. En vez de “seré la sensación” la letra original decía “seré todo un campeón”. En las dos versiones se conserva el espíritu jocoso, un hombre o una mujer sintiendo que ganaron en la vida porque lograron ahorrar. Para esa frase en particular me inspiré en una de mis canciones favoritas, La noche de Salvatore Adamo, cuando dice “baile con chicas que estaban tan bien, que a uno le ponen mal / pero ellas vieron que yo era también / un tipo fenomenal”.
Y el comienzo del jingle se me ocurrió pensando en Charly García y sus canciones de joven rebelde. ¿Cómo comenzaría Charly una canción sobre ahorro? (suponiendo que se viera en esa extraña situación) y me salió: “Mi viejo jubilado / no tiene ni un centavo”, inspirada en Mr Jones, o pequeña semblanza de una familia tipo americana. Álvaro fue el que dio con la palabra centavo, yo estaba pegada en que “viejo jubilado” rimara con “no tiene ahorros”. Difícil tarea, jaja.
La parte más compleja para mí estaba lista: ahora solo había que producirlo con alguien de confianza que entendiera perfectamente lo que queríamos transmitir. Para mí no había duda, tenía que llamar a Miguel Miranda, de Miranda y Tobar, compositores y productores musicales que han hecho bandas sonoras de muchas películas chilenas y comerciales, han ganado múltiples premios y lo mejor, soy amiga de Miguel, trabajamos rápido (hemos hecho canciones para diversas campañas para otras marcas y también ha musicalizado canciones de “La CuentaCuentos”) y confío en que tiene un gusto impecable.
Le mandé el demo, le propuse grabar lo antes posible y de inmediato se puso a trabajar. Con mi demo ordinario del auto, Miguel hizo una primera composición para romper el hielo. Siguió haciendo ajustes y cuando llegué a grabar y me mostró lo que había avanzado, yo ya estaba extasiada, era justo lo que había imaginado. Luego grabamos las voces, se le agregaron bronces y riffs de piano y el resultado es este, nuestro primer jingle de APV de Fintual: