Este viernes el conflicto entre Israel e Irán alcanzó un nuevo nivel de intensidad, generando incertidumbre en los mercados financieros. Tras los ataques aéreos israelíes sobre instalaciones nucleares y militares en Irán, Teherán respondió lanzando cientos de misiles balísticos y más de 100 drones hacia Israel, marcando una diferencia significativa con episodios anteriores donde Irán había esperado días o semanas para contraatacar.
León Ascendente
La ofensiva israelí, denominada "León Ascendente", tuvo como objetivo desmantelar la infraestructura nuclear y eliminar a altos mandos militares iraníes. En respuesta, Irán lanzó una serie de ataques simultáneos que incluyeron misiles y drones, alcanzando áreas como Tel Aviv y Jerusalén. Las autoridades israelíes activaron sistemas de defensa, reportando la destrucción de la mayoría de los proyectiles. Sin embargo, la situación sigue siendo tensa, con sirenas sonando en varias ciudades israelíes.
El gobierno de Irán calificó el ataque israelí como una "declaración de guerra" y prometió una respuesta firme. Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que las acciones contra Irán continuarán "mientras sea necesario". Además, se suspendieron vuelos en el espacio aéreo israelí, y el gobierno ordenó la detención de la producción en los campos de gas Karish y Leviatán.
Impacto en los mercados
Tras los ataques entre ambos países, los índices accionarios vieron caídas en todo el mundo.
Por ejemplo, el S&P 500 tuvo una caída de -1.1% y el Nasdaq un -1.3%. En este contexto, la volatilidad aumentó, con el índice VIX subiendo más de un 13%, reflejando el temor del mercado ante una posible escalada del conflicto.
A esta turbulencia se sumó un fuerte aumento en el precio del petróleo internacional, recordemos que Irán es un actor importante en el estrecho de Ormuz, una vía crucial para el transporte de petróleo. Si el conflicto se extiende o se intensifica, hay una preocupación de que Irán pueda interrumpir el paso por este estrecho, lo que afectaría la oferta de petróleo a nivel global.
El aumento en el precio del petróleo también tiene efectos en lo económico, por medio de un potencial aumento en la inflación global. Esto se ve reflejado en la subida de tasas de interés en EE.UU, lo que sugiere expectativas de que la Reserva Federal podría mantener su tasa de referencia más alta debido a la presión inflacionaria derivada del alza en los precios del petróleo.
A futuro
Como lo hemos dicho en otras ocasiones, los eventos geopolíticos suelen tener un efecto en la volatilidad de corto plazo de los mercados, pero no marcan una tendencia en horizontes largos de inversión.
En el siguiente ejercicio mostramos lo que ha pasado en otras situaciones bélicas en el pasado, y se ve que en general, los mercados han seguido subiendo a pesar de este tipo de conflictos.
Aunque no podemos predecir con certeza si ocurrirá lo mismo en esta ocasión, podemos afirmar que todos estos movimientos resultaron ser casi irrelevantes a largo plazo. Por lo tanto, si tu inversión tiene un horizonte prolongado, te sugerimos mantener la calma y seguir con tu plan de inversión original.