México superó a China como principal socio comercial de Estados Unidos

La crisis del COVID expuso un problema que tienen las cadenas de suministro “ultra eficientes”: son muy delicadas. Si se complica una parte del proceso, por pequeña que sea, se complica toda la producción, y en todo el mundo.

¿Qué es nearshoring?

La crisis del COVID expuso un problema que tienen las cadenas de suministro “ultra eficientes”: son muy delicadas. Si se complica una parte del proceso, por pequeña que sea, se complica toda la producción, y en todo el mundo.

Por eso, en los últimos años algunas empresas se han propuesto implementar estrategias de nearshoring u onshoring: acercar la producción a los consumidores para acotar lo que puede salir mal.

La búsqueda por cadenas de producción más cortas y seguras probablemente va a reducir lo que el mundo en agregado es capaz de producir, porque la producción no necesariamente será en donde sea más eficiente o barata. Pero entre países, hay algunos que salen beneficiados, y otros que salen perjudicados. China tiene más que perder, porque tiene poca afinidad política y está lejos del mundo desarrollado. Y lo opuesto pasa en México.

De hecho, recientemente México superó a China y Canadá como principal socio comercial de Estados Unidos.

La nueva fábrica de Tesla en México

La megafábrica de Tesla es probablemente la insignia del nearshoring en México. Martha Delgado, la entonces subsecretaria para Asuntos Multilaterales y DDHH, estimó que el monto de inversión inicial sería de 5 mil millones de dólares y 5.000 puestos de trabajo, y que podría llegar a 10 mil millones de dólares y 10.000 empleos. Hay que tener en cuenta que estas son proyecciones y hay distintas dando vueltas: por ejemplo, el New York Times cree que van a ser 7.000 nuevos empleos.

¿México ya se ha visto beneficiado?

Todavía falta para celebrar. Hasta ahora el fenómeno de nearshoring no es muy evidente en los datos de inversión.

Sigue siendo algo más anecdótico. Por ejemplo, empresas de naves industriales diciendo que hay una grandísima demanda por espacios para producción industrial, o anuncios de intención de inversión en México. Pero el consenso general es que el fenómeno de nearshoring ofrece un gran potencial para México.

Si México aprovecha plenamente este potencial depende de muchas cosas. Algo que podría limitar el impacto son los problemas en los suministros de agua que se necesita para los procesos productivos de estas empresas en el norte de México. Por eso las autoridades mexicanas piden que la inversión también considere aportes eficiencia en el uso del agua, su distribución y aporte en su tecnología. También podría ser una limitante la inseguridad y la incertidumbre política.

Aunque no se sabe cuánto tiempo va a durar este ímpetu por blindar las cadenas de producción, por ahora el reacomodo de la cadena de suministro global parece explicar, al menos en parte, que México haya pasado a ser el principal socio comercial de Estados Unidos.

Y en términos más amplios, el nearshoring también podría ser parcialmente responsable de que la economía mexicana haya sido más dinámica de lo que la mayoría esperaba este año. Esperamos que el nearshoring siga impulsando al crecimiento en México por algunos años más.