Congreso Futuro: el Lollapalooza de las ideas
Esta navidad nos pilló por sorpresa a mi polola y a mi. Después del 30 de noviembre ya era 20 de diciembre y aún no teníamos regalos. Mientras ella vitrineaba en el celular, yo revisaba mi correo. En un momento, cuando eliminaba mensajes, vi uno que me llamó la atención y me llenó de emoción “¡¡ooooh, vienen Friston y Mancuso!!”
Sin embargo, su primera reacción fue la de decirme “pero si no estaban en el cartel del Lolla”. Entre que me reí y me sentí igual que Jonna Hill en Misión Rockstar, cuando su polola le pregunta “¿Quién es Mars Volta?”
Karl Friston es uno de los tipos más prominentes en la Neurociencia actual, mientras que Stefano Mancuso es un capo de un área novedosa, denominada “inteligencia vegetal”. “Yo y mis ñoñerías”, pensé. Y le conté que no, que venían al Congreso Futuro. Ella me miró con cara de “aaah si, algo me acuerdo de eso”, y siguió viendo si regalar una polera o una cartera a su hermana.
Ahora que le doy una segunda o tercera mirada al tema, creo saber por qué el Congreso Futuro aún no es “tan” conocido. Resulta que la primera versión del Congreso Futuro fue más como un Wacken o un Creamfields: ¡Súper de nicho! Se organizó en embajadas, con la Academia de Ciencias y universidades.
Y ahí creo que está el punto. Los científicos (y científicas), muchas veces cometemos el error de creer que todo el mundo se interesa por lo que hacemos. Nos juntamos y alucinamos entre nosotrxs, contándonos el último paper de una profesora X en Inglaterra. Vemos con emoción casi navideña si una nueva técnica nos resulta, y lógico, nos emocionamos cual cartel de un megaconcierto con Pink Floyd reunido tocando en el valle de la Luna, si viene una de aquellas personas de las que hablamos día y noche y que intentamos imitar en nuestros experimentos. Básicamente, para quienes trabajamos en ciencia, estas personas son rockstars. Rockstars de las ideas (y algunos en verdad lo son).
¿Qué es el Congreso Futuro?
Por suerte, el Congreso Futuro ya no es más un evento de nicho. Ahora es un Lollapalooza. Este congreso, que se viene realizando desde el 2011 (al igual que el Lolla), y que solo traía a científicos, ahora congrega además a un montón de artistas, políticos, y personas destacadas en sus áreas, provenientes de todas partes del mundo y de todas las áreas del conocimiento, para conversar sobre lo que han estado haciendo en sus investigaciones, obras, o actividades (para mostrar su último disco, igual que Lolla). La gran diferencia es que este congreso dura una semana (JA!), será en un teatro, sin sol y sentado (JA JA!), y las entradas son gratuitas (JA JA JA!).
Lo bueno es que las temáticas son variadas (sigo con la analogía, asi que sí, igual que el Lolla). Podemos partir el día viendo las mejoras en la observación astronómica (día lunes, bloque 4). Después de un café, escuchar temáticas relevantes para el progreso del país, como la electromovilidad (Cristina Bu, Bloque 9). Un almuerzo por el barrio y luego conversar sobre cosas súper tangibles y cruciales como el cáncer de mama (Dra. Pilar Carvallo, bloque 11) y terminar la semana pensando en cosas tan locas como la forma en que las nuevas tecnologías afectan la conciencia humana (Dra. Divya Chander, bloque 22).
Aunque uno debe elegir los espacios en los que participará, ya que las entradas son por bloques, igual es posible ver las demás charlas por streaming (al menos así ha sido en los años anteriores, yup…como el lolla). Además, suelen haber congresos regionales en paralelo al principal, y si al igual que yo eres de región, existe la posibilidad de ver a algunos de estos rockstars sin tener que viajar a Santiago.
Pero ¿cuál es la idea de traer a tipos de todos lados y que hablan en difícil? En primer lugar, la gracia es este sea un espacio para que estas personas puedan comunicar sus ideas, nutrirnos de lo que están haciendo y podamos entender sus visiones. Por eso, el requisito fundamental es hablar en fácil. Además, el hecho que nos hagan cuestionarnos cosas tan simples como “Cómo los y las estudiantes pueden aprender mejor usando las redes sociales” (que es de lo que va a hablar Corneliu Bjola el día lunes en el bloque 5) hasta cosas tan voladas y locas como “¿Las plantas piensan?” (mi rockstar favorito, Mancuso), creo que es la gran gracia de este Congreso.
Por si fuera poco, y manteniendo las analogías, el Congreso Futuro también tiene algo similar al Kidza (Lolla para niños), denominado “Futuristas”. Es un portal con un montón de material informativo para que “Niños y niñas, sus familias y las comunidades educativas compartan en torno a la ciencia y el conocimiento”
Congreso Futuro 2023
Si se interesan, las entradas son gratis (justo esto no es como Lolla). Las pueden solicitar en Puntoticket (¡aprovechen de disfrutar que no hay cargo por servicio!). Para hacer el asunto un poco más fácil, les dejo el programa resumido y sus temáticas al final de este escrito.
Y ustedes, ¿a qué rockstar de las ideas irán a ver?